Skip to main content

Durante los siglos de la Edad Media, junto con la invención del papel, los chinos dieron los primeros pasos en el desarrollo de la imprenta.

Buscaron un procedimiento que, en lugar de copiar los escritos a mano, les permitiera obtener muchas reproducciones iguales de un mismo original.

La solución fue labrar los caracteres de una página en una plancha de madera, de manera que éstos sobresalientes.

Después entintaban la plancha y aplanaban sobre ella hojas de papel. Como ves, es un sistema parecido a los sellos de hoy en día.

Siglos más tarde, cada signo se labraba en un trozo separado de madera, que se combinaba con otros para formar expresiones.

El sistema era más rápido, aunque la enorme cantidad de caracteres de la lengua china dificultaba las cosas.

Los primeros libros, calendarios y noticias se imprimieron con estos procedimientos.

¿Quién inventó la imprenta en Europa?

La invención de la imprenta con tipos movibles es considerada una realización Europea que tuvo lugar en el siglo XV, señalándose como su autor a Johannes Gutenberg, un impreso alemán.

Sin embargo, los orientales fueron realmente los descubridores del procedimiento de la impresión con tipos movibles. Los europeos, no obstante, la perfeccionaron y desarrollaron la industrialización.

Existe un cierto misterio en relación con este invento. Cuatro nombres son mencionados siempre que el invento de la imprenta se somete a discusión.

Los nombres en cuestión son los siguientes: Johannes Gutenberg, Lourens Coster, Peter Schöffer y Johannes Fust.

Durante mucho tiempo, los historiadores no se ponían de acuerdo cuando hablaban de hechos y teorías. Pero en un esfuerzo por terminar la disputa decidieron considerar a Johannes Gutenberg el inventor del tipo movible, ya que era de él de quien se tenía más información.

Imprenta
Johannes Gutenberg. Foto: National Geographic

Johannes Gutenberg

No se tiene clara la fecha de nacimiento del inventor alemán Johannes Gutenberg. Pero se ha determinado que nació en Maguncia, pequeño poblado de Alemania, hacia el año 1400.

Proveniente de una familia noble, su verdadero nombre era Friele Gensfleisch. Tampoco se tienen antecedentes concretos de su muerte estableciéndose que el hecho ocurrió probablemente a fines de 1467 o a comienzos de 1468.

En su pueblo natal se desempeñó como orfebre. Se trasladó junto a su familia a Estrasburgo, donde instaló una empresa de grabados en madera, que sería el punto de partida para el desarrollo futuro de su legado.

Gutenberg construyó, entre 1436 y 1450, un aparato que logró fundir satisfactoriamente las letras metálicas que usó en sus primeros libros, con las cuales imprimió su famosa Biblia en 1455.

A modo de anécdota podemos contar que debido a sus deudas, Gutenberg fue embargado y la imprenta que lo hizo famoso quedó en mano de sus acreedores, quienes con la venta de la Biblia aumentaron en cinco veces su inversión inicial.

Imprenta
Gutenberg. Foto: Pixabay

Imprenta asiática

Gutenberg en realidad no inventó nada. Mucho tiempo antes que él, los chinos habían desarrollado las técnicas de la impresión y de la fabricación de papel.

Los orfebres ya sabían fabricar buriles y los viñateros de Renania ya utilizaban prensas con tornillo en sus vendimias. Pero todavía nadie había reunido estos distintos inventos.

El ingenio del impresor alemán lo llevó a desarrollar un artefacto mecánico verdaderamente eficaz para la reproducción de los textos escritos. Así se puede considerar como el verdadero padre del libro moderno.

Nueva sociedad

En 1450 se asoció con Johannes Fust, quien le prestó ochocientos florines para que instalará la imprenta, fundiera las letras metálicas y comprara el pergamino para imprimir la Biblia.

El préstamo consideraba el salario de los ayudantes y el sustento del propio Gutenberg.

Dos años después Fust entregó la misma cantidad nuevamente, para el término del proyecto que contemplaba dos volúmenes del libro sagrado.

Pero faltaba la ornamentación a mano y el empaste de los impresos. Fust molesto finalmente decide ir a los tribunales exigiendo que se le devolviera inmediatamente el dinero.

El perfeccionamiento de los caracteres metálicos móviles fue lo que mayores inconvenientes le produjo, como se puede deducir de las muchas pruebas efectuadas sin éxito.

Lo más inmediato fue la elección de la base de los impresos: el pergamino, elemento caro y poco corriente, no era lo bastante liso ni lo suficientemente liviano como para facilitar un trabajo rápido y límpio.

A pesar de la simpleza de la imprenta, significó para Gutenberg invertir casi su vida entera en el perfeccionamiento de ella.

Logró revolucionar la vida cultural, política, social e incluso religiosa de una buena parte de la humanidad.

Imprenta
Imprenta. Foto: Pixabay

Una rápida evolución

Hasta el siglo XIX se habían ido creando algunas tipografías de gran belleza y se había perfeccionado el oficio de la imprenta.

Hacia 1800, sin embargo, los avances en el mundo de la impresión hicieron hincapié en aumentar la velocidad. Charles, tercer conde de Stanhope, introdujo la primera prensa de imprimir construida totalmente de acero.

En 1803, los hermanos Henry y Sealy Fourdrinier instalaron en Londres su primera máquina de fabricar papel; producía una bobina de papel continuo capaz de hacer frente a una demanda en constante crecimiento.

Más tarde, en 1814 Friedrich König inventó la prensa accionada por vapor, revolucionando toda la industria de la impresión.

Aporte de Mina

En 1817, Francisco Xavier Mina, liberal español que organizó una expedición para apoyar la lucha de los patriotas mexicanos por su independencia, llevó a México la primera imprenta de acero, en la que imprimió sus periódicos y proclamas.

En 1886 los equipos de composición se perfeccionaron, permitiendo reducir drásticamente el tiempo necesario para componer un libro en comparación con las labores manuales.

Por último, la fotografía ha venido a contribuir al desarrollo de los modernos procesos de fotomecánica.

Los ordenadores o computadoras que se utilizan hoy como máquinas de oficina pueden producir imágenes listas para impresión, reduciendo el tiempo y los costes de los principales procesos de imprenta.

Las computadoras se utilizan de forma habitual para crear dibujos, definir tipos, digitalizar y retocar imágenes y fundir todos estos elementos en un único trozo de película o directamente sobre la plancha de imprimir.