En un día como hoy, pero del año 1550, Pedro de Valdivia inició una nueva expedición desde Santiago -con doscientos soldados bien armados y buen contingente de indios-, que se instaló en el valle de Andalién, cerca del río Biobío. En la noche del 22 de febrero, las huestes del conquistador fueron atacadas por las fuerzas indígenas. Los conquistadores salieron victoriosos.