Revisemos: Según la enciclopedia libre Wikipedia, usamos el concepto de guión para referirnos a «un texto en que se expone, con los detalles necesarios para su realización, el contenido de una película, historieta o de un programa de radio o televisión. Es decir, un escrito que contiene las indicaciones de todo aquello que la obra dramática requiere para su puesta en escena (abarca escenografía, iluminación o sonido)».
Otra definición es la publicada por Enrique Martínez-Salanova Sánchez definiendo al guión como «el relato escrito de lo que va a suceder en la película. Es algo muy sencillo y con un cierto parecido a una novela. Se desarrolla completamente un argumento teniendo en cuenta que todo hay que filmarlo, grabarlo y montarlo. El guión son los diálogos, las escenas, las secuencias, y una descripción minuciosa y pormenorizada de lo que los actores hacen en escena. El guión es el «montaje en borrador» de una película. Es muy importante que un escritor de guiones sepa de cine, de montaje, de los entresijos del rodaje, de la dificultad de realizar determinados efectos y que tenga idea de lo que cuesta económicamente realizar una película. En definitiva que sepa lo que se puede y lo que no se puede hacer en el cine».
Pasos de un guión
Antes de proceder con la escritura misma del guión se requiere llevar a cabo una fase de gestación de todo guión. Lo primero es saber para qué se realizará en guión, es decir cuál es el objetivo que mueve el proyecto de realización. Dicha claridad se tiene cuando se logra definir el mensaje a comunicar. Por ejemplo: La necesaria protección de los animales.
Un buen guionista o aspirante a guionista se preocupa de tener su mente repleta de información sobre el tema, no escatima esfuerzos pues todo cuanto sepa es lo que finalmente constituirá su capital de trabajo.
El conocimiento puede venir de distintas fuentes: la experiencia personal, lectura de prensa o literatura, fuentes audiovisuales o acceso a información de los medios formales e informales, a fin de tener miradas múltiples y variadas.
Luego es fundamental escribir el argumento de modo muy escueto, unas cinco o seis líneas es la extensión indicada.
Luego escribe lo mismo pero con muchísimos detalles, llegando a unas 4 planas. Cuando lo logres tendrás por resultado la «Sinopsis» del relato.
Una vez definida la historia o relato, será necesario reescribir la sinopsis dilatadamente poniendo énfasis en los aspectos de imagen y audio para dar una mirada acerca de cuáles serán los requerimientos que el proyecto significará.
Finalmente podemos decir que cuando escribamos guiones debemos tener muy claro qué es lo que queremos contar con el texto, la imagen y/o el sonido pues para el espectador la información viaja por varios canales y todos ellos se ven sensibilizados en este momento.
Si tú quisieras jugar a ser director de cine o consideras que tienes una buena idea para un entretenido guión audiovisual o de radioteatro, tendrías que empezar por crear el guión.
Para más información visita ABC guionistas
Sorpresa de Yerbas Buenas