Es una señora que vivió una vida muy triste ya que perdió a su única familia, o sea, su mamá. Ella había nacido en Inglaterra, su nombre es Mitzi y cuando su mamá murió sólo tenía 7 años. Esto ocurrió mientras ella dormía con Mitzi, y cuando ella se dio cuenta del temblor se llevó a Mitzi afuera.
Ellas vivían en un edificio que tenía sólo 4 pisos y se encontraban en el piso 3. De repente, el temblor aumentó y el techo se cayó. Por suerte las personas se salvaron, pero la mamá de Mitzi no y la tiró afuera mientras ella seguía dormida y su mamá le caía el techo encima.
Mitzi despertó cuando la tiraron y lloró mucho. Ella fue criada por sus abuelos que la trataron con mucho cariño pero nunca pudo olvidar ese momento tan triste.
Al pasar los años ella fue creciendo hasta llegar a lo que es ahora, una tierna abuelita de 63 años. Ella vive también en un edificio de 4 pisos, sólo que vive en un callejón con edificios pero no como los de ahora sino los antiguos. El callejón se encuentra en Inglaterra, pero es un lugar más o menos alejado de los ruidos.
El callejón está pintado de tan vivos colores como el callejón de la Boca pero este es el callejón Bilila. Bueno, Mitzi estaba tejiendo mientras hubo un pequeño temblor, debido a esto se desmayó y cuando despertó se encontró en su cama con un té de manzanilla al lado suyo. Y de la nada entró su vecina que vivía en el piso de arriba.
Su nombre era Victoria y ella ya conocía la historia de Mitzi; además esto de que se desmayaba cada vez que había un temblor ya había sucedido varias veces. Su vecina le dijo: «Es mejor que vaya a ver a un psiquiatra para que la ayudara a evitar esos desmayos por los temblores.
Mitzi le dijo que no quería porque ella misma quiere resolver sus problemas. Al pasar el tiempo ella se quedó pensando qué podía hacer para solucionar su problema. Un día, se levantó muy rara; de pronto, en el desayuno se le cayó la cuchara y la cuchara se levantó sola. Mitzi se quedó sin habla e intentó hacerlo nuevamente… y lo hizo. Ella tenía poderes psíquicos y podía teletransportarse, leer la mente y muchas cosas más. Incluso hizo sonar sus dedos y tembló.
Pero Mitzi no se desmayó, su vecina fue a verla pero la vio ahí parada y le preguntó por qué no se desmayó y Mitzi le respondió «porque no me asusté». Mitzi le contó su secreto y se lo demostró y Victoria le dijo casi lo mismo, que también había desarrollado poderes psíquicos, pero que no podía controlar los temblores, pero eso no importa. Ellas guardaron este secreto y vivieron felices para siempre.
Sorpresa de Yerbas Buenas