Con motivo de sus ochenta años y como un reconocimiento a su vasta y prestigiada trayectoria la ministra de Educación, impuso la condecoración Orden al Mérito Docente y Cultural Gabriela Mistral en grado de Gran Oficial, al destacado escritor y Premio Nacional de Periodismo, Guillermo Blanco Martínez, en ceremonia realizada en la Biblioteca Nacional, el pasado 22 de agosto.
La distinción otorgada en nombre del gobierno de Chile, es uno de los más importantes reconocimiento que el país otorga a las personalidades nacionales o extranjeras que se han destacado por su contribución a la educación, la cultura y el desarrollo del país.
En la ocasión, Blanco también fue homenajeado por la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), en reconocimiento a su invaluable aporte al patrimonio cultural chileno. Además, Guillermo Blanco presentó junto al escritor Jaime Collyer, su última novela, Luto en primavera, publicada por Editorial Andrés Bello.
En el acto estuvieron presentes el ex Presidente de la República, Patricio Aylwin; la directora de Dibam, Nivia Palma, el presidente de la Cámara Chilena del Libro, Eduardo Castillo, familiares y amigos del escritor.
De acuerdo a la secretaria de Estado, la distinción es un reconocimiento a su dilatada trayectoria, su contribución a la educación y al desarrollo de la sociedad a través de sus novelas. También a su desempeño como periodista y docente, y además por ser uno de los escritores más importantes que ha dado la literatura de nuestro país.
“Es un escritor exitoso que se ha preocupado por la educación de nuestro país y por ayudar al desarrollo cultural de nuestra sociedad a través de sus novelas”, sostuvo Provoste.
Agregó que “desde su rol como presidente del Consejo Nacional del Libro y la Lectura durante la administración del ex ministro José Pablo Arellano, contribuyó enormemente a potenciar la lectura y a trabajar por hacer de nuestro país, una nación que lea más y mejor”.
Desde sus primeras publicaciones, aparecidas en revistas culturales como Amargo, Estudios, Rumbos, y Finis Terrae, se caracterizó por su envidiable dominio del idioma y la capacidad para expresarse en distintos formatos. Así fue como en la década del 50’ no sólo se consagró como narrador sino también como periodista, forjando un estilo único, inconfundible por su espíritu crítico e impregnado de humor.
Entre 1959 y 1964 dio a conocer sus primeros libros: Sólo un hombre y el mar (1959), compilación de cuentos; Misa de Réquiem (1959), novela breve, y Gracia y el forastero, su obra más conocida y que en la actualidad ostenta más de cuarenta y seis ediciones.
El reconocimiento de sus coetáneos se materializó en 1971, cuando fue nombrado miembro de número de la Academia Chilena de la Lengua, en reemplazo del recién fallecido Salvador Reyes. Asimismo, fue galardonado con el Premio Nacional de Periodismo en 1999 por sus valiosos aportes a la cultura.
Guillermo Blanco nació en Talca en 1926. Su bibliografía es extensa y está compuesta por más de veinte títulos que abarcan el cuento, la novela, el ensayo y la crónica. En 1956 ganó un concurso nacional del diario El Mercurio con un cuento antológico que ha sido leído por generaciones de lectores: «Adiós a Ruibarbo». Entre sus libros de cuentos destacan: «Sólo un hombre y el mar» (1957); «Cuero de Diablo» (1966); «Los borradores de la muerte» (1969) y «Libro de Buen Dolor» (1986).
Las novelas de Guillermo Blanco responden a los parámetros discursivos de la generación de escritores que emergen en la literatura chilena en la década del 50, entre los que figuran Margarita Aguirre, José Donoso, Jorge Edwards, María Elena Gettner, Claudio Giaconi, Luis Alberto Heiremans, Enrique Lafourcade y José Manuel Vergara, entre otros.
Orden al Mérito Docente y Cultural Gabriela Mistral
La Orden al Mérito Docente y Cultural Gabriela Mistral se otorga a personalidades nacionales y extranjeras que hayan destacado por su contribución en beneficio de la Educación, la cultura y el enaltecimiento de la función docente. Expresa el agradecimiento de la Nación y el Gobierno hacia el compromiso y mérito demostrado por los nominados y un reconocimiento a la labor formadora, en el caso de los docentes.
La orden al mérito docente y cultural «Gabriela Mistral» se otorga en los grados Gran Oficial, Comendador, Caballero o Lazo de Dama.
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Grado de gran oficial: es el reconocimiento más alto que se otorga a personalidades nacionales y extranjeras de gran jerarquía intelectual, que hayan prestado servicios eminentes a la Educación o al Cultura y cuya labor docente o artística sea de indiscutible reconocimiento público.
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Grado de comendador: se otorga a personalidades nacionales y extranjeras que se hayan distinguido por su aporte a la labor educacional, cultural o en el enaltecimiento a la función docente.
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Grado de Caballero: se otorga a 1) profesores, intelectuales y artistas extranjeros, como reconocimiento a su labor educacional o cultural, en beneficio del país. 2) a los chilenos que se hayan destacado o han prestado servicios distinguidos a la educación o la cultura.
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