LA TERCERA, 10 de noviembre 2006
Por: Alejandra Muñoz y Francisca Sandoval
No fue el boicot de los estudiantes el principal problema de la prueba Simce de los segundos medios. Un retraso en la entrega del material por parte del Centro de Medición de la Universidad Católica en el sector sur de Santiago y la curiosidad de algunos profesores en Antofagasta fueron los puntos negros de la jornada.
En Santiago, donde la aplicación de la prueba se licitó a las universidades Católica y Diego Portales, la situación en las zonas norte y centro fue normal, pero en el sector sur hubo dificultades: llegaron los examinadores pero no las pruebas. Este hecho dejó a 34 establecimientos sin rendir el test y a otros dándolo más tarde.
El proceso estaba a cargo del Centro de Medición de la U. Católica (MideUC). Su director, el académico Jorge Manzi, explicó que la planificación funcionó bien con las pruebas de cuarto básico, pero que en el caso de la enseñanza media hubo una equivocación, que hizo que a algunos colegios se llegara tarde con el material. A otros, sencillamente, no se llegó.
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Según se explicó en el Ministerio de Educación, el 98% de los colegios del país -2.410- rindió la prueba sin mayores dificultades. |
“Se detectó un error en la confección en la programación de las rutas de despacho, que determinó el problema. Está todo en curso para que esto se pueda llevar a cabo mañana (hoy) sin problema”, sostuvo Manzi.
Molestia en colegios
La situación fue criticada por los establecimientos afectados, ya que los alumnos tuvieron que esperar largo rato antes de partir con sus pruebas, sin que se les diera una explicación rápida a la causa del problema. “Los examinadores llegaron a las 9.25 con las pruebas y todo el material. Eso hizo que la prueba misma comenzara a rendirse a las 10.00. Ahora, si piensas que los chicos estaban aquí desde las ocho, es bastante la demora”, sostuvo Enrique Sarmiento, director del liceo Froilán Yáñez de La Cisterna.
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El Ministerio de Educación manifestó su molestia y anunció que se aplicarán las sanciones establecidas en el contrato con la entidad. Algunos colegios no quieren dar el Simce hoy. |
Para el alumno Felipe Urrutia, el problema no sólo fue el atraso, sino también falta de información: “Fue súper incómodo, tuvimos que esperar mucho rato y cuando llegaron no nos dijeron nada. Los que llegaron tarde fueron los que tomaron la prueba. No nos ofrecieron ni una disculpa. Sólo nos dijeron que faltaba material”.
Consciente de la situación, durante la tarde Jorge Manzi ofreció disculpas públicas a los estudiantes, los apoderados y los colegios que no pudieron rendir el Simce.
Sin embargo, para algunos las explicaciones no bastaron: en el colegio Saint Patrick de San Miguel deberían rendir la prueba hoy, pero decidieron no darla. “Todo colegio tiene su dinámica y funcionamiento. Mañana (hoy) nosotros tenemos otras cosas que hacer. Teníamos 100% de predisposición, pero mañana (hoy) no es lo mismo”, dijo el inspector general del establecimiento, Juan Luis Gamboa, quien destacó que la prueba no será vista objetivamente por toda la comunidad educacional a raíz del atraso.
En el Ministerio de Educación, los problemas registrados con el Centro de Medición de la UC causaron seria molestia: la ministra Yasna Provoste supervisará hoy la aplicación de los tests en los colegios que no la dieron ayer. “Vamos a aplicar todas las sanciones contenidas en ese contrato, eso es materia de nuestro equipo jurídico”, dijo Provoste.
La autoridad explicó que eran 2.444 los colegios que debían dar la prueba Simce de segundo medio y que el 98% de ellos rindió los test sin dificultad. Eran 277.514 los estudiantes de segundo medio en condiciones de participar en la medición. Los resultados estarán listos en abril del próximo año, junto con los de cuarto básico.
Escolares no aplicaron boicot a la pruebaPese a las amenazas de boicotear la prueba Simce, los alumnos de segundo medio de los liceos emblemáticos de Santiago rindieron ayer sin problemas el test. Si bien la respuesta final estaba en manos de cada uno de los escolares, en general los estudiantes decidieron realizarla porque consideraron que al no darla los únicos perjudicados serían ellos. En el Instituto Nacional, incluso los alumnos que querían boicotear la prueba la rindieron adecuadamente, en concordancia con la decisión del resto de sus compañeros. “Yo quería dejar el Simce en blanco, pero la decisión se respeta porque creo en la democracia”, señaló Gino Luize, estudiante de segundo medio de dicho establecimiento. En los demás liceos de Santiago el panorama fue el mismo: alta asistencia y buena disposición para realizar el examen. Ello ocurrió, incluso, en el Liceo 1 y el Manuel Barros Borgoño, que en un principio impulsaron el boicot. Sobre la dificultad de la prueba, los estudiantes dijeron que estuvo fácil, sobre todo la de Lenguaje, que contó con 36 preguntas e incluyó bastante comprensión de lectura. La de Matemáticas, que tenía 45 preguntas, fue calificada como “un poco más difícil” por los escolares, quienes aseguraron que toda la materia consultada era parte de su plan de estudios. |
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