Érase una vez, en un lejano lugar, vivían tres niñas muy lindas. Ellas siempre andaban juntas, cuando se iban al colegio y cuando volvían.
Cierto día, una de las niñas encontró tres cajas con cinco gatitos en cada una. A Javiera, como se llamaba la niña, le dio lástima y se los llevó a su amigas, quienes se burlaron de ella.
– »Eres tonta, cómo se te ocurre recoger unos gatos asquerosos», dijo una.
– »Quizás tenga pulgas», afirmó otra.
– «Eres ordinaria y muy cochina. Saben, mejor no nos juntemos con ella», agregó la otra.
– «Sí, vámonos», sentenció una de ellas.
La pobre Javiera se fue muy lastimada y se los entregó a su mamá.
Por: Gioconda González, 9 años.