LA TERCERA, 27 de noviembre de 2006.
Por : Marisol Olivares
Cuando Daniel Murray cursaba el tercer año de Derecho en la Universidad de North Western, en Boston, llevaba cinco años tomando cursos de español y estaba convencido de que no aprendería a hablarlo si no viajaba a una nación hispana. Por eso analizó las dos opciones que tenía en Sudamérica: Argentina y Chile. Sin embargo, fue la forma de la bandera nacional lo que lo decidió por el país: muy parecida a la de su natal Texas. Así llegó a cursar un semestre de su carrera en la U. de los Andes. “Además, Chile es pequeño, pero tiene todo cerca: playa, montaña y desierto”, comenta.
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No sólo los programas de intercambio traen alumnos al país. También es un destino frecuente para jóvenes latinoamericanos que buscan cursar sus carreras de pregrado e incluso sus postgrados: hay 3.300 estudiantes de este tipo en las aulas nacionales. |
Él es uno de los 3.800 alumnos que actualmente se encuentran en Chile gracias a los programas de intercambio. Estados Unidos predomina en este tipo de convenios que actualmente mantienen todas las universidades tradicionales chilenas. Sin embargo, éstos no son los únicos foráneos en el país: durante la última década se ha convertido en un destino frecuente para jóvenes que buscan cursar sus carreras de pregrado e incluso postgrados en una nación distinta de la suya. Según cifras recogidas por el Consejo de Educación Superior, actualmente hay 3.346 estudiantes extranjeros de este tipo, de los cuales 807 están en programas de magíster y doctorados.
Las áreas elegidas
Cuando vienen a matricularse en una carrera, los jóvenes de países desarrollados, principalmente Francia, Alemania y España, prefieren programas humanistas. Los alumnos latinoamericanos -en su mayoría de Perú, Colombia, Ecuador, Argentina y Bolivia- optan por tecnología y Matemáticas.
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Aunque este fenómeno no es nuevo, sí ha sido de rápido crecimiento. Un ejemplo: en 2004, la U. De Chile albergó 970 extranjeros en sus aulas, este año son 1.300. |
Aunque este fenómeno no es nuevo, sí ha sido de rápido crecimiento. Un ejemplo: en el 2004 la U. de Chile albergó 970 extranjeros en sus aulas, este año son 1.300 y esperan que el 2010 la cifra llegue a los 3.000. Según las cifras entregadas por las instituciones, es la universidad que concita mayor número de estudiantes foráneos en intercambio, seguidos por la Católica con 1.150 y la Católica de Valparaíso con 230.
Entre las instituciones privadas lideran las universidades Del Desarrollo, Adolfo Ibáñez y Diego Portales, con alrededor de 200 alumnos cada una. Un aspecto que contribuirá para aumentar el número de extranjeros en las aulas chilenas, es la beca Juan Gómez Millas que el Mineduc entrega también a alumnos latinoamericanos que acrediten haber rendido un test de selección como la PSU en sus países de origen y de escasos recursos.
Buenas ganancias
Cuando una universidad se internacionaliza, no sólo obtiene beneficios académicos por la extensión de sus programas de investigación y reconocimiento, también gana en lo económico. Según un estudio del director de Vínculos y Cooperación Internacional de la Universidad de Valparaíso, Carlos Ramírez, Chile se ha transformado en la opción de postgrados en América Latina, lo que le ha permitido crecer en número, presencia, recursos e infraestructura.
Los norteamericanos pagan entre US$ 6.500 y US$ 12.500 semestrales para venir de intercambio a Chile. De esto, entre US$ 2.500 y US$ 3.000 quedan en universidades chilenas, según la misma investigación. Una de las 438 estudiantes extranjeras que se matriculó en post grados en la Universidad Católica es Solene Bergot, quien llegó hace tres años desde la Sorbonne París 1, para doctorarse en Historia sin saber una gota de español. Hoy cuenta en perfecto castellano que eligió este país porque se enamoró de un chileno y con el convenio de doble titulación que tiene la Universidad Católica con su casa de estudios de origen podrá convalidar el grado académico que obtenga en Chile.
La doble titulación es otro tipo de convenio que está calando fuerte en el sistema universitario chileno y que contribuye a que el país sea el primero a nivel sudamericano en recibir alumnos extranjeros. Hasta el 2005 se contabilizaban cerca de 5.000, incluyendo estudiantes de intercambio, pregrado y postgrados. Sólo le siguen Argentina que reúne 3.200 y Uruguay con 2.000.
Muere Alejo Carpentier